viernes, 10 de diciembre de 2010

Jose

Da igual quién seas, da igual lo que hagas. No importa si te portaste bien o no, ni a cuántas personas hiciste feliz. Por mucha falta que hagas vivo, la muerte te acabará encontrando, cuando ella quiera. No me gustaría hacer una reflexión extensa sobre lo que opino sobre nuestra archienemiga la muerte. Solo quería decir eso. Quizá por eso habría que preocuparse menos por morir y más por vivir.

Aun tenía pendientes muchas conversaciones contigo, había mucho que aprender de ti y ya no podrá ser. Doy gracias por haberte conocido. Te echaré de menos, Jose.

lunes, 29 de noviembre de 2010

El del pelo blanco


Siempre serás muy grande para todos, Leslie Nielsen. Te echaremos de menos.

domingo, 28 de noviembre de 2010

Why did you call?

Veamos amigos, ¿Internet lo tiene todo? NO. No tiene las letras de una canción que a mí me motiva mucho, mucho, y que da título al post. Dicha canción pertenece al disco The Runaway, del grupo británico The Magic Numbers (como podríais ya imaginar por la ilustración).
Este disco me gusta mucho porque es relajante, bonito y tranquilo. Las voces son deliciosas, no sé; a pesar del aspecto grotesco de las damas de la banda, hacen unos coros muy finos. ¡Yo soy fina pero canto fatal, es la realidad!
Esta es una canción hermosa que, creo yo, habla de desamor, pero no es así de sencillo: simplemente el sentimiento se fue.
¡Para que no se diga que Internet no lo tiene todo, voy a publicar la letra! Debo agradecérselo a Carlos, porque gracias a él... he podido acceder a la letra.
Disfrutadla si podéis.

WHY DID YOU CALL?


Why did you call tonight?
I was beginning to move on
Slipped then I fell inside
You give me reason to do nothing but wrong
Let's dance with the sinners tonight
It feels so right
You leave me helpless, defeated, alive
While I just panic at the break of dawn
Why did you call tonight?
(I wanna know if every truth is a lie)
I was beginning to move on
Dreams of another life
(I wanna know if every truth is a lie)
You send a shiver to a body that's cold
She shakes to the beat and rewinds
I'm paralyzed
It feels like I'm losing this fight
You're just a habit, when it hits me you're gone
A race for life
When it stops
Blood is on my hands
I've tasted love
Dare not to believe
my time is up
I don't believe...
Why did you call tonight?
(I'm gonna love you with the trick of a light)
Why did you call?
(I'm gonna love you with the trick of a light)
If I were a sinner tonight
It'll feel so right
You leave me helpless, defeated, alive
While I just panic at the break of dawn
Erase your life
Fuck it up
Blood is on my hands
I've tasted love
A race for life
When it stops
Dare not to believe
my time is up
I don't believe, I don't believe at all
If this is real then I know
I shouldn't wake you up
There's no mistake,
I lose the feeling when
the music stops
I wanna hate you but you're
never gonna mean that much to me
(You will, but you won't
You will but you don't)
Turn out the lights,
I wanna find you within every touch
Whatever happens,
let's forget about the venom in us
I wanna love you but you're
never gonna mean that much to me
I don't believe at all.

martes, 23 de noviembre de 2010

Sobre la desfachatez.

Hoy me ha ocurrido algo. Bueno, no a mí exactamente, pero me he visto envuelta en ello. Esta mañana he salido de mi casa y he subido mi calle pasando a otra muy concurrida. Lo que me he encontrado es a una señora mayor, de unos ochenta y pico años, tirada en el suelo y otra mujer atendiéndola. Yo me he parado a ayudar. La señora mostraba la nariz grisácea, y no paraba de sangrar por la boca. La pobre estaba bastante aturdida y temblaba; por el miedo a la caída, por el daño que habría sufrido. En esto ha llegado otra mujer y también se ha quedado para echar una mano. La señora nos ha dicho que estaba yendo en ese momento al hospital San José de Madrid - que por cierto, es privado - porque tenía cita para hacerse unas pruebas. Entonces la primera mujer ha aprovechado y se ha ido al hospital, que estaba a una sola manzana del lugar, para pedir que nos ayudaran a socorrerla. Entre tanto nos hemos quedado la otra mujer y yo, dándole constantemente pañuelos a la señora, que no paraba de sangrar por la boca y ya se había manchado en abrigo y el jersey. Un repartidor de alimentos, que se encontraba en el centro de hostelería de al lado, nos ha ofrecido su ayuda y nos ha indicado dónde estaría si queríamos algo. Otra mujer se ha parado a interesarse y ayudar y se ha quedado con nosotras. La primera ha vuelto del hospital muy disgustada porque le habían negado la ayuda y la habían despachado con un "que se coja un taxi". Mientras ella esperaba a que llegara un taxi, nosotras seguíamos allí, y ha llegado una controladora de parquímetros - o creo que ese era su trabajo, vamos - que se ha quedado a asistir a la señora y ha llamado a una ambulancia, que por lo visto ya estaba avisada y venía de camino. Otro señor más que iba conduciendo se ha parado en la esquina para ver si necesitábamos algo, y se ha vuelto a ir ante la negativa. La tercera mujer ha ofrecido su coche para llevarla ella misma al hospital. Después la señora, que se iba encontrando mejor y había dejado de sangrar visiblemente, quiso apoyarse en la pared y llamamos al hombre que estaba en el bar para que nos ayudara con ella, y así hizo. La segunda señora, al ver que no había nada más que hacer, se despidió y se marchó. Mientras, la primera mujer y la controladora de parquímetros hablaba con la señora, preguntándole si quería que llamaran a alguien, y la tercera se ha ido al hospital a ponerles de vuelta y media. Al poco de volver ella - sin ningún resultado - ha llegado la ambulancia. Los dos hombres la recogieron y la tercera se fue. Cuando ya habían metido a la señora en la ambulancia, yo me he ido. Las dos que quedaban se estaban dando los teléfonos para comunicarse sobre las novedades del caso, ya que la controladora de parquímetros pensaba pasarse por el hospital para ver cómo seguía la señora. He ido a clase deprisa, pues llegaba tarde a unas prácticas obligatorias, pero aun así iba consternada por lo que había pasado. Todo esto ha durado unos veinte minutos.

Al volver de clase unas horas después, he pasado por el hospital. Quería una hoja de reclamaciones para poder manifestarme de manera más formal sobre lo sucedido. La mujer que había allí me ha denegado la hoja de reclamaciones al no ser yo paciente del hospital - además me ha mandado a hablar con Atención al Cliente en vez de explicarme ella misma por qué no podía yo rellenar la dichosa hoja -, y nos hemos puesto a discutir sobre lo sucedido. Entre otras cosas, me ha dicho que la mujer se había inventado lo del taxi, y que ella misma había llamado a la ambulancia. Ha tenido bemoles de decirme con tono desafiante que si yo tenía testigos de lo del taxi, ella tenía más testigos de lo "realmente" sucedido - a lo que yo me he quedado anonadada, ¿qué se supone que significa eso?. Finalmente me ha dicho que le había dicho a la mujer que los médicos no podían salir de quirófano para atender a alguien de la calle - usted perdone, no sabía que todos los médicos de este hospital estuvieran en quirófano a la misma hora -, y que la calle le corresponde al SUMA. Me he ido.

Hemos llegado a un punto que las personas no nos importan. ¿No hay un código de médicos que diga que tienen que ayudar al necesitado, aunque sea FUERA del hospital? Todo esto es un sistema y nada se puede salir de norma, aunque la norma sea del todo absurda. Aunque la recepcionista tuviera la desfachatez de defender dicha norma. La verdad es que todo esto da pena, mucha pena. Y menos mal que queda gente que se preocupa más y hace lo que puede. Yo me he quedado más tranquila, a pesar de no haber aportado mucha ayuda. La verdad es que no sé qué hacer en esas situaciones, aunque de haber estado sola supongo que habría actuado de forma similar a las otras personas. Pero de verdad, que me parece increíble el trato que se ha dado por parte del hospital. Pobre señora, espero que esté mucho mejor y que se le haya quitado el susto. Pero es que no hay derecho. Las personas, el individuo importa cada vez menos.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Wish you were here.



Pink Floyd es una de las bandas más importantes de los últimos tiempos, y yo la estoy descubriendo ahora. Tampoco pasa nada, no me he interesado de forma consciente. El caso es que estoy en ello: ya he escuchado Dark Side Of The Moon y Wish You Were Here, y ahora estoy con The Wall. No había escuchado música así jamás, y me parece que es bastante profunda y abstracta. Sobre todo porque apenas dicen nada. Eso a veces está bien, porque algunas canciones están llenas de cosas que yo creo que sobran. Y a veces, sobran las palabras.
La canción Wish you were here me pone melancólica, como la mayoría (véase Eclipse, por ejemplo). Pero me ha apetecido compartirla. Disfrútala si puedes.

Y sí. Desearía que estuvieras aquí.




So, so you think you can tell
Heaven from Hell,
Blue skies from pain.
Can you tell a green field
From a cold steel rail?
A smile from a veil?
Do you think you can tell?

Did they get you to trade
Your heroes for ghosts?
Hot ashes for trees?
Hot air for a cool breeze?
And cold comfort for change?
Did you exchange
A walk on part in the war,
For a lead role in a cage?

How I wish, how I wish you were here.
We're just two lost souls
Swimming in a fish bowl, 
Year after year,
Running over the same old ground.
What have we found
The same old fears.
Wish you were here.

lunes, 8 de noviembre de 2010

Por favor

Dime qué puedo hacer.
Qué puedo hacer para sentirme mejor conmigo misma. ¿Cómo puedo conseguir que la seguridad en mí misma no dependa de los demás?

Y cuando estoy así, es más difícil salir airosa de este bucle de coincidencias desafortunadas. Parece que cuando algo negativo ocurre, todo va a peor. Y lo que normalmente te sentaría bien, ahora te sienta mal. Cuando alguna situación es delicada, hay que pensárselo bien antes de hacer las cosas; no siempre un comportamiento es adecuado. Y la torpeza es algo que puede empeorar las cosas una barbaridad.

Pero mientras el "responsable" está actuando torpemente, tanteándome para intentar averiguar qué hacer, ¿qué hago yo? Posiblemente debería dar un poco de tregua, poner más de mi parte... Pero no quiero. No me sale del alma. Estoy triste.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Cuando el corazón hace cosas raras

La ESO, bachillerato, la carrera... Los sentimientos y las situaciones siguen siendo los mismos, para mi asombro. El hecho de madurar no hace que seamos menos irracionales, menos orgullosos...
Tal vez no sea una cuestión de madurez, sino de riqueza interior, empatía y paciencia. Sin duda todo esto puede cultivarse al madurar, pero a estas alturas sabemos que una persona de 50 años puede ser mil veces más irracional que una de 20. No importa si eres capaz de pagar un piso, una comida, una manutención... no, eso no habla sobre la calidad de tu persona. Sobre tus relaciones con los demás. Por supuesto, alguna relación tiene que haber entre la madurez y esos otros atributos.

Solo decir, que yo noto que estoy creciendo. Aunque las situaciones y los sentimientos sean los mismos, nuestras reacciones ante ellos (casi siempre) son diferentes a las que eran cuando éramos unos adolescentes.

Eso, y que estoy muy contenta por ello. Vamos progresando.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

¡Cómo me gusta!



Tengo que decirlo, cómo me gusta que la gente, pase lo que pase, nunca renuncie a hacer lo que le gusta. Es posible que lo que te haga feliz no te haga rico, ni mucho menos, pero no por ello hay que abandonarlo.
Hoy he encontrado a una persona encantadora, que hace lo que necesita y lo que desea. Aunque a veces deseamos algo que nadie considera necesario, pero para nosotros lo es. ¿Verdad que sí? Es importante, que por el camino de lo correcto no perdamos cosas valiosas de nosotros mismos. Al final, puede perderse uno mismo.
¿Y qué más me ha demostrado? Que al mal tiempo, buena... conducta. Uno ha de hacer lo que tiene que hacer.
Espero no olvidarme nunca.


Un beso y adiós.
O mejor: dos.
(Despedida, Las últimas palabras del rey, Máximo Mintaka)

martes, 2 de noviembre de 2010

Anoche tuve un sueño...

Hoy he tenido un sueño, no sé, más raro de lo habitual. No me ha dejado dormir muy bien. A lo largo de mi vida he soñado cosas muy raras, como que era el fin del mundo, que había mensajeros voladores, que me acostaba con un personaje de dibujos animados, que estaba de cañas con los de Franz Ferdinand... Cosas raras, sí. Pero esta era diferente. Más que nada, porque las cosas eran diferentes.
Si te paras a pensar, todo lo que he dicho cabe en un sueño, son cosas del subconsciente, pero cosas "concebibles" (bueno, lo de los dibujos no tanto). Por eso, aun estando soñando, todo nos parece muy real. Pero esta noche, las cosas eran de una forma que no cabía imaginar. Todo era diferente. Había un nuevo sistema mundial, las cosas... simplemente, se hacían de otra forma. Era demasiado inquietante para que yo me lo creyera y pudiera dormir, y seguir. Me despertaba una y otra vez, intentando volver a soñarlo para poder entender algo.
Era un nuevo orden en el mundo. No era nuestro planeta tal y como lo conocemos. No sabría decir si las cosas iban mejor. Todo era extraño, un mundo muy extraño, y todos estábamos allí.
Puede que se hubiera erradicado el capitalismo.

Tristemente, apenas recuerdo nada. Daría mucho por volver a recordarlo, porque lo que he sentido ha sido único. Tan único, como lo que he soñado.

lunes, 1 de noviembre de 2010

There's a fog upon L.A



Blue Jay Way es una calle de Los Angeles. Yo he estado allí, y he de decir que está bastante perdida. Es pequeña, estrecha, curva, sinuosa... George Harrison le dedicó una canción por una vez que se tuvo que quedar allí solo en una noche de niebla. A veces me siento identificada. La calle es como mi cabeza. La niebla que a veces la cubre, los surcos con miles de pensamientos a veces desordenados. En la letra, anochece en Blue Jay y la persona está sola, esperando que por fin lleguen a por él antes de que haya desfallecido. A la vez, pensamos en el propio arrendajo azul: quiero volar... supongo que todos queremos, ¿no?


Evidencia: este es mi nuevo blog. 
Aquí me voy a dedicar más a escribir sobre lo que me dé la gana, ya que mi otro blog solo está dedicado a mis letras. Ya tenía ganas, porque el otro, como comprenderéis, estaba bastante limitado en cuanto al contenido (y yo soy muy legal con esas cosas xD).

Así que aquí habrá reflexiones, historias, anécdotas, menciones a canciones, películas y personajes, fotografías...

Disfrútalo... si puedes.